Durante décadas ignoré la importancia que tiene la comida para estar bien mentalmente. Tampoco sabía lo mal que pueden hacer el exceso de alcohol, ni lo necesario que es comer sano. Mi cuerpo era como un bote de basura: todo lo aceptaba. Después, investigando me di cuenta de que somos lo que comemos. Así como unSigue leyendo «La droga Inocente»